El parlamentario andaluz, Francisco Menacho, ha valorado de forma positiva que el Gobierno haya rectificado e incluya…
El parlamentario andaluz, Francisco Menacho, ha valorado de forma positiva que el Gobierno haya rectificado e incluya en el proyecto de ley de reforma del IRPF y del Impuesto de la Renta de No Residentes, aprobado el viernes en Consejo de Ministros, la posibilidad de regularizar las pensiones no declaradas de emigrantes retornados y residentes en España con pensiones procedentes del exterior. “Nos alegramos de que el Gobierno haya sido sensible a la demanda de los emigrantes retornados y sobre todo, que hayan dejado de tratarlos como si fuesen defraudadores”, ha apuntado. En este sentido, ha trasladado la felicitación, en nombre de la Ejecutiva provincial, a la Asociación de Emigrantes Retornados y apunta que “no es una medida graciable, sino fruto de la movilización ciudadana que se ha demostrado que era necesaria para hacer ver al Gobierno la injusticia que se estaba cometiendo con este colectivo en España y con una incidencia especial en esta provincia”.
El diputado socialista ha recordado que el PSOE de Cádiz ha acompañado al colectivo en sus reclamaciones y en la campaña de protestas que han venido desarrollando, al mismo tiempo que ha subrayado “que se han elevado iniciativas de respaldo en el Congreso y en el Parlamento, donde nos hemos topado siempre con el rechazo del grupo del PP hacia un tema de tanta sensibilidad social”. “Mientras los grandes defraudadores consiguen amnistías en este país concedidas por el PP, ellos han tenido que luchar para conservar el fruto de años trabajando en el extranjero, alejados de las familias y en mucho casos, pasando calamidades”, ha recalcado.
Si bien reconoce que “se ha dado un paso importante”, Menacho asegura que “quedan flecos que el PSOE va a seguir exigiendo al Gobierno”. Así desde el Grupo Socialista se exige que la regularización, con un plazo de seis meses a partir de enero de 2015, se haga de oficio por parte de la Agencia Tributaria y que se dé a los emigrantes todas las facilidades de pago con fraccionamientos sin devengo de intereses, ni intereses de demora, ni sanciones. En la misma línea, se solicita también que todos aquellos que hayan pagado dichos recargos o penalizaciones tengan derecho a la devolución por parte de la Agencia Tributaria.
Desde el PSOE se pide además que Hacienda remita a los emigrantes retornados, que consten en la base de datos de la Agencia Tributaria con rentas no declaradas, los borradores de las declaraciones de los ejercicios no prescritos, para que den su conformidad o presenten alegaciones, sin perjuicio de que puedan presentar su declaración por iniciativa propia.
Francisco Menacho considera que “el Gobierno podía haber evitado el sufrimiento ocasionado a emigrantes retornados honrados, que llevan toda su vida aportando divisas a este país y que nunca se hubieran imaginado que, tras regresar a España, iban a ser tratados como defraudadores”. “Muchos de ellos en una edad muy avanzada y estado de salud delicado, se han llevado un gran disgusto durante todo este tiempo en el que el Gobierno podía haber reaccionado pues se lo estábamos advirtiendo y reclamando”, ha señalado.
Por último, el dirigente socialista ha aprovechado la ocasión para recordar “la salida de tono que tuvo el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, en su estrategia habitual de meterse en todos los charcos, cuando tras las protestas de un colectivo que representa a 70.000 personas en la provincia dijo que estaban siendo manipulados por el PSOE y que tenían que pagar como todo el mundo, tachándolos precisamente de defraudadores”. “Si fuese una persona sensata, debería dejar el cargo porque el Gobierno con su rectificación ha dejado en entredicho sus palabras, más propias de un comisario político que de un representante institucional que debe velar por defender los derechos de los ciudadanos”, ha apuntado Menacho que censura también “que sea tan tirano hasta con sus propios trabajadores de la Subdelegación del Gobierno a los que ha ninguneado cuando han mostrado preocupación por los altos índices de cáncer que se da en la plantilla, en lugar de abordar con ellos el problema y tratar de calmar los ánimos”.