La secretaria general censura los “insultos” de Moreno Bonilla a la presidenta de la Junta y le acusa de despreciar al Parlamento “como la zorra de la fábula despreciaba las uvas que no podía alcanzar”
La secretaria general del PSOE de Cádiz, Irene García, ha lamentado que el presidente regional del PP “haya vuelto a ofrecer su cara más oculta y haya acudido a la provincia a insultar a la presidenta de Andalucía, en un nuevo ejercicio de desprecio a las instituciones y a las reglas del juego democrático”. “El señor Moreno Bonilla se dedica ahora a repartir carnés de demócrata y a exigir a la presidenta de la Junta quiénes deben ser sus interlocutores, negando toda legitimidad a los miembros del Parlamento de Andalucía; ese mismo Parlamento al que desprecia como la zorra de la fábula despreciaba las uvas que no podía alcanzar”, ha señalado.
Irene García ha rechazado los “ataques extemporáneos e improcedentes” hacia la presidenta de la Junta y ha ironizado con la supuesta celeridad de Mariano Rajoy en recibirla. “El señor Moreno Bonilla dice que el presidente Rajoy ha hecho un hueco en su apretada agenda casi de inmediato. Aunque no ha explicado en qué consisten las múltiples obligaciones de esa agenda en la que desde luego no figura la solución de los problemas de los españoles. De la misma forma que no ha aclarado si la reunión con la presidenta de la Junta se hará de forma personal o si el señor Rajoy comparecerá en la misma a través de un plasma”, ha afirmado.
“Poner en duda el compromiso municipalista de la presidenta de la Junta y del Gobierno andaluz, cuando se trata de la primera Administración que ha reconocido por ley la obligatoriedad de asistir económicamente a los ayuntamientos, es una osadía por parte del presidente regional del PP, que cada día que pasa parece más un presidente del PP de regional y que está llevando a esa formación a unas cotas de ridículo impensables en un partido que quiere ser alternativa para gestionar los intereses de esta tierra”, ha afirmado la secretaria general.
Además, Irene García ha calificado de “auténtica provocación” que el presidente regional del PP “haya venido nuevamente a la provincia a criticar el rechazo de enmiendas de su partido a los Presupuestos de Andalucía, cuando el Partido Popular entiende esas enmiendas simple y llanamente como un instrumento de confrontación con la Junta y como un elemento de manipulación de la opinión pública a través de su aparato de propaganda”. Frente a esa situación, “sorprende enormemente que el presidente regional del PP guarde silencio mientras comparte mesa, estrado y escaño con representantes del Partido Popular de Cádiz que vienen votando negativamente a iniciativas que pretenden mejorar la calidad de vida de los gaditanos y de las gaditanas, y especialmente a la puesta en marcha de un plan de empleo que responda a la realidad de la provincia que encabeza los registros europeos de paro”.
“Antes de fijarse en la actuación de otros partidos y del resto de Administraciones, el señor Moreno debería pedir perdón a esta provincia por el permanente acoso al que le tiene sometida el Gobierno de Mariano Rajoy y por el constante abandono al que le castigan los representantes electos de su propio partido”, ha asegurado. En esta línea, ha inquirido al presidente regional del PP por su parecer acerca de la actitud de diputados en el Congreso como la alcaldesa de Cadiz y los alcaldes de El Puerto o Algeciras, así como de la senadora y alcaldesa de Jerez. “El señor Moreno Bonilla debería responder si la actitud de Teófila Martínez, de Alfonso Candón, de José Ignacio Landaluce o de María José García-Pelayo al haber rechazado reiteradamente un plan de empleo, al negarse a que se exigiera carga de trabajo suficiente para los astilleros o al condenar a la Algeciras-Bobadilla a unas dotaciones presupuestarias ridículas responde también a una actitud de arrogancia o si simplemente se debe al sectarismo de unos representantes públicos que actúan al servicio de sus siglas y de espaldas a las necesidades de esta provincia”, ha señalado.
“Escuchar al señor Moreno Bonilla presentarse en Chiclana como el gran valedor de unos contribuyentes a los que el Gobierno del PP ha castigado con una desconocida subida de impuestos y como defensor de los derechos de unos trabajadores públicos permanentemente acosados por su partido es una auténtica broma de mal gusto solo comparable con sus esfuerzos por aparecer como adalid de la sanidad o de la educación públicas después de haber aplaudido los reiterados recortes impulsados por Mariano Rajoy y sus intentos de desmantelamiento de las grandes políticas sociales”, ha concluido la secretaria general.